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El póker, o el vídeo póker, es uno de los juegos de cartas más emocionantes de un casino online. Ganar o perder una mano depende de cuán atento estés a las señales que den los otros jugadores. Y al riesgo que estés dispuesto a correr en una apuesta. ¿Vas a ser temerario o precavido? Cualquiera de las dos opciones requiere un buen plan de juego.
La otra parte del asunto es elegir qué tipo de póker vas a jugar. Para facilitarte la tarea, te contamos algunas consideraciones sobre algunos de los más populares.
Texas Hold’em
Si buscas aprender cómo jugar al póker, el Texas Hold’em es el más popular. Por lo tanto, resulta una buena opción para empezar.
A esta modalidad pueden jugar desde un mínimo de dos jugadores hasta un máximo de diez. Las apuestas de cada jugador van formando el pozo. Tu objetivo es quedarte con ese pozo. Puedes lograrlo de dos formas. Una, si tienes la mejor jugada cuando finaliza la mano de póker. Otra, cuando los oponentes no igualan tu apuesta y, por lo tanto, abandonan.
De un mazo estándar de 52 cartas, el crupier reparte dos privadas para cada jugador en el sentido de las agujas del reloj. Después, durante las rondas de apuestas, se muestran sobre la mesa hasta cinco cartas descubiertas, llamadas “comunitarias”.
Como necesitas cinco cartas para formar tu mano de póker, deberás recurrir a las cartas comunitarias para conseguir las tres que te faltan. Cuando te llegue el turno, puedes apostar siempre y cuando nadie lo haya hecho antes. Si alguien apostó, puedes igualar la apuesta. Incluso es posible subir la apuesta. O abandonar. Y si nadie apostó antes, también es válido simplemente pasar.
Cada mano se constituye por el preflop y el postflop. El preflop tiene una ronda de apuestas que termina cuando todas se igualan. En ese momento comienza el postflop. Claro que si alguien apuesta y nadie iguala, ese jugador se quedará directamente con la mano.
En la fase postflop hay tres rondas de apuestas: flop, turn y river. El primero en jugar es aquel que esté ubicado en la ciega pequeña. En el flop, habrá tres cartas comunitarias en la mesa. Si al finalizar la ronda quedan jugadores disputando el pozo, pasas al turn, en el que se agrega una carta comunitaria y se desarrolla una nueva ronda de apuestas. Si cuando termina la ronda sigue habiendo jugadores de pie, pasas al river. En esta última ronda, los jugadores que lleguen al final deberán mostrar sus cartas privadas. Por supuesto, ganará el que tenga mejor jugada.
En la siguiente mano, todos los jugadores rotarán un lugar en el sentido de las agujas del reloj. Recuerda que como esta modalidad no tiene límite, podrás apostar sin techo, el único límite es lo que tengas en la mesa cuando te llegue el turno. Si decides jugar todo, podrás ver el resto de cartas comunitarias, y se lleva el pozo quien tenga la mejor jugada. Si hay un jugador con más dinero que aquel que se jugó todo, podrá seguir jugando las rondas restantes.
Homaha
Si colocas el Texas Hold’em en una batidora, obtienes el Omaha, en el que los jugadores reciben cuatro cartas privadas, de las cuales solo pueden usar dos.
El juego sigue teniendo las cinco cartas comunitarias con el flop, el turn y el river. Las rondas de apuestas se juegan de la misma manera que la otra modalidad.
En el Omaha High, los jugadores con la mejor mano se quedan con el pozo, igual que en el Texas Hold’em. Sin embargo, en el Omaha 8-or-Better se divide el pozo entre la mano más alta y la más baja. Se trata de un juego rápido que te puede volver mucho más loco que el Texas Hold’em.
5-Card Draw
La diferencia en esta modalidad es que te reparten cinco cartas. Después de las apuestas, cada jugador puede cambiar las cartas que desee por unas nuevas. Empezará el jugador que esté a la izquierda del crupier.
7-Card Stud
Este era el juego más popular antes de que explotara el Texas Hold’em. Pueden jugarlo entre dos y ocho participantes, sin flop ni cartas comunitarias. El juego comienza con dos cartas boca abajo y una tercera boca arriba.
Después de que te repartan siete cartas, tres boca abajo y cuatro boca arriba, eliges la mejor combinación de cinco cartas, con la misma dinámica de manos de los otros juegos.